Conversación con Miguel de Andrés Frías, Director General de Hortelanos
Su historia
¿Cómo nace Hortelanos?
M.dA.: Hortelanos tiene tres momentos clave en su historia. Su primer “nacimiento” fue en 2013, cuando dejé mi empleo y comencé a trabajar como freelance, formando un equipo de colaboradores y creando la marca Hortelanos como sello de sus proyectos, aunque ciertamente la marca personal se lo comía todo. En 2018, la empresa dio un paso importante al contratar a su primer empleado, comenzando a trabajar con clientes destacados como Grupo La Rioja Alta, S.A., una bodega de renombre en la D.O.C. Rioja.
Finalmente, en 2021, Hortelanos experimentó su tercera transformación, impulsada por la pandemia, que evidenció la necesidad de digitalización en muchas empresas. Esto atrajo clientes de sectores diversos, consolidando la agencia como un equipo de 8 profesionales con colaboradores externos.
Si pudierais definir a Hortelanos en tres palabras o ideas que resuman vuestra esencia, ¿cuáles serían y por qué?
M.dA.: La esencia se sustenta en tres pilares fundamentales. En primer lugar, la cultura, que sitúa a las personas en el centro de todo lo que hacemos. Sin grandes tecnologías, patentes ni infraestructuras, nuestro mayor recurso es el talento y la profesionalidad de quienes trabajan aquí. Por ello, nos esforzamos en conformar el mejor equipo posible, ofreciendo condiciones salariales competitivas, flexibilidad horaria (fuimos pioneros en la semana laboral de 4 días en el País Vasco), teletrabajo parcial y beneficios sociales, como el reparto de utilidades. Esta cultura se fundamenta en la confianza, la transparencia y la responsabilidad.
A esto se suma la CreaDatividad, un enfoque que combina creatividad y datos. Aunque la creatividad sigue siendo el alma de las agencias, en la era digital los datos son esenciales para comprender el comportamiento de los consumidores, tomar decisiones acertadas y desarrollar ideas innovadoras e impactantes. La unión de ambos elementos nos permite ofrecer soluciones únicas y efectivas.
Finalmente, el inconformismo define nuestra manera de actuar. Este espíritu nos impulsa a buscar constantemente la superación, el aprendizaje continuo y la mejora permanente. Nos esforzamos por sorprender a nuestros clientes y afrontar cada desafío con optimismo, haciendo de este compromiso una fuente de grandes satisfacciones y un motor para mirar siempre hacia el futuro.
Su recorrido
¿Qué aprendizajes habéis cosechado a lo largo de estos años que han marcaron un antes y un después en vuestra trayectoria?
M.dA.: Creo que voy a señalar tres aprendizajes:
- El equipo: Formar un buen equipo es crucial, aunque no siempre se acierte. Hemos aprendido a valorar a las personas excepcionales que encajan en nuestra cultura y a reconocer los errores al no dar con perfiles adecuados, falta de adaptación o expectativas incumplidas. No hay una fórmula mágica, pero acertar marca la diferencia.
- Los clientes: No todos los clientes son adecuados. Cuando desde el principio no hay compatibilidad cultural, de visión o de personalidades, lo mejor es cerrar la relación. Forzar estas situaciones solo genera desgaste, pérdida de tiempo y frustración.
- El valor de nuestro trabajo: Es fundamental defender el esfuerzo y dedicación que hay detrás de cada proyecto. Ya sea una web, una estrategia o una identidad corporativa, nuestro trabajo merece ser reconocido y valorado.
¿Qué es lo que más disfrutáis del proceso de crear y cultivar estrategias para las marcas?
M.dA.: Hay momentos que definen nuestro estado de ánimo. Cuando a final de mes presentas un informe de resultados de un e-commerce a un cliente y las ventas y el resto de KPIs han subido, cuando presentas una identidad visual y el cliente se va encantado; cuando ganamos un concurso tras competir con otras agencias; o cuando sientes que tu trabajo sirve para algo más que para conseguir un resultado económico (como por ejemplo con campañas ligadas a la promoción de nuestro territorio, para asociaciones como Contra el Cáncer en Álava o Aspace-Asociación de Parálisis Cerebral o campañas de sensibilización).
Y esta manera de hacer, ¿cómo repercute en vuestros clientes?
M.dA.: La repercusión se da en dos niveles: primero, concienciamos a los clientes sobre la importancia de invertir en comunicación como factor estratégico de su negocio. Segundo, los acompañamos en transformaciones profundas, desde nuevas formas de relacionarse con sus stakeholders hasta la digitalización de procesos comerciales y el logro de objetivos tangibles.
¿Cómo os imagináis la evolución de Hortelanos en los próximos años y en qué dirección os gustaría crecer como equipo?
M.dA.: Actualmente somos 8 personas, un equipo que, aunque ya es considerable para nuestro entorno, aún tiene margen de crecimiento. Queremos incorporar perfiles nuevos y reforzar áreas clave para ofrecer mayor valor a nuestros clientes. Esto irá acompañado de una expansión territorial para captar clientes en otras provincias y comunidades, y profundizar en perfiles como empresas de más de 10 empleados con necesidades emergentes en marketing digital, startups, negocios de e-commerce y sectores competitivos donde la comunicación es estratégica.
Además, buscamos consolidar nuestro modelo de agencia y cultura corporativa para ser una empresa atractiva que atraiga el mejor talento en el País Vasco.
Su experiencia con Talenom
¿Cómo os ha ayudado Talenom a ser más eficientes?
M.dA.: Lo primero que hay que señalar es que Hortelanos no se entiende sin la ayuda que la oficina de Talenom en Vitoria nos presta. Sus dos socios, Jon y Adrián, han sabido construir una asesoría que entiende la realidad de las Pymes; que se adapta a sus necesidades; que busca la eficiencia a través de la digitalización; que les guía en todo lo que tiene que ver con la gestión; y que tiene verdadera vocación de servicio al cliente. Todo ello, unido a un gran equipo, nos ha hecho la vida mucho más fácil. Y puedo asegurar que encontrar una asesoría que reúna todas estas cualidades no ha sido sencillo.
¿Qué aspecto de nuestros servicios consideráis que ha sido más valioso para vuestro negocio?
M.dA.: Soy licenciado en Publicidad y Relaciones Públicas, con formación en Ciencia Política y un máster en Dirección de Marketing, pero sin experiencia en finanzas. Por ello, el apoyo de Talenom ha sido vital para nuestra gestión económico-financiera, destacando también su eficiencia en recursos humanos y asesoramiento administrativo, incluyendo acceso a subvenciones. Además, es un gran aliado para empresas del Kit Digital o Agentes Digitalizadores.
¿Recomendaría Talenom como una asesoría de confianza?
M.dA.: Desde luego. Y así lo hago cada vez que puedo. Puedo decir con satisfacción que varios clientes de Talenom han llegado a la compañía por recomendación nuestra y su nivel de satisfacción es muy elevado.